logotipo de OALA

Directorio de las Casas Actuales:
Vice Provincia de Brasil
Vicariato de Consolación
Vicariato de Castilla
Región de Malta
Estatistica Actual

Otras Circunscripciones

Historia de la O.A.L.A.

Comentarios o Preguntas

La Orden de San Agustín en el Brasil


P. Luiz A. Pinheiro, OSA

Está aún por escribirse una historia de los agustinos en el Brasil de forma más global, científica y sistemática. Disponemos solamente de algunos artículos, álbumes y folletos conmemorativos. Nos faltan para comenzar catálogos de los documentos de nuestros archivos y de su estado. Toda una desafiante tarea que, de un modo u otro, no podremos eludir.

Posiblemente la primera vez que el nombre de San Agustín haya resonado en tierras brasileras, fuera en 1551, cuando los portugueses de la armada enviada por don Manuel atracaron en un recodo del actual estado de Pernambuco, el 28 de agosto denominándolo "Cabo de San Agustín".

Poco se puede decir sobre la presencia de la Orden de los Ermitaños de San Agustín en el Brasil antes de 1889. La Provincia de Portugal envió a varios de sus hijos a la Colonia del Brasil, entre los que destaca Fray Custodio de Faria, profesor del Seminario de San José en Río de Janeiro. Otros tantos brasileros ingresaron en la Orden en Portugal como es el caso de Fray José de Santa Rita Durão (17201784), natural de Cata Preta (Minas de Arais), autor del poema épico "O Caramuru".

Especial mención merecen los Agustinos de la Congregación Descalza.



La real congregación de los Agustinos

reformados en Brasil

Esta Congregación dio cuatro obispos al Brasil: Fray Francisco de la Asunción Brito (17321808), de Minas Gerais, que fue Obispo de Olinda y Recife en 1772, y Arzobispo de Goa en 1774. Le siguió en la sede Pernambucana, Fray Tomás de la Encarnación Costa Lima (17231784), entre 17741784. Ambos eran brasileros. Los otros dos fueron portugueses: Fray Antonio Correa (17211808), Arzobispo de Bahía; y Fray Vicente del Espíritu Santo (17301798), Obispo de Goiás, que no llegó a tomar posesión de la sede (1).

Otros portugueses de renombre que actuaron en Brasil como profesores fueron: Fray José de la Sagrada Familia (17881859) en Belém, Pará; y Fray Francisco Anhes de Carvalho (17801859) en Río de Janeiro. Merecería un estudio especial el brasileño Fray Benito de la Trinidad (+ 1841), examinador de las diócesis de Bahía y Pernambuco y predicador real, cuyos sermones fueron publicados en seis volúmenes (2).

La primera fundación agustiniana de la cual tenemos escasa información se dio en 1693, cuando llegaron a Bahía nueve frailes estableciéndose en una de las colinas del Salvador donde fundaron el Convento Nª Sª de Palma. Allí permanecieron hasta 1824, cuando se dio la supresión por el Emperador Pedro I (3).

Vamos ahora a detenernos en los grupos que iniciaron la presencia agustiniana en las Tierras de Santa Cruz: La Congregación de los Agustinos Recoletos y la Provincia del Santísimo Nombre de Jesús de Filipinas.

Pero antes, vamos a bosquejar el contexto en el cual se desarrolló la historia agustiniana de Brasil en esa primera etapa.



Contexto en que la Orden inicio su historia en el Brasil

El desarrollo del catolicismo en el Brasil tiene características muy particulares que no es del caso desarrollar en este ensayo. Durante la Colonia la Iglesia en el Brasil estuvo sometida a la corona portuguesa bajo el régimen del Patronato y las misiones siempre fueron entendidas en función de la expansión colonial portuguesa (4).

El cristianismo vivido en el Brasil, será el resultado del encuentro y confrontación entre el catolicismo de la Cristiandad, implantado por los portugueses, y las religiones indígenas y africanas, que da a la religión del pueblo hasta hoy día un perfil muy singular (5). Básicamente el catolicismo brasilero heredará los rasgos del catolicismo portugués en su carácter guerrero, patriarcal, laico y devocional (6). El catolicismo popular de carácter sincrético surge, así, como resultado de un saber de violencia y resistencia expresado en la variopinta riqueza de la religiosidad popular (7).

Un cambio significativo comenzó a operarse con la influencia del movimiento ultramontano en el país, a partir de mitad del siglo XIX, período comúnmente denominado de romanización o tridentinización del catolicismo brasilero (8). El episodio que corona este proceso inicial es la realización del Concilio Plenario Latinoamericano en Roma en 1899.

Políticamente, Brasil iniciaba su vida republicana desde 1889 cuando después de la separación unilateral de la Iglesia por parte del Estado se fue dando una lenta y difícil reaproximación a través de acuerdos de mutua colaboración (9). Económicamente el país aún se apoyaba en el monocultivo del café con su estructura latifundaria volcada a la exportación. Socialmente se acentuaban los grandes contrastes que siempre caracterizaron a la sociedad brasilera. La abolición de la esclavitud no dio respuesta a la inmensa masa marginada y sin protección legal y real. Predominaba la aristocracia real despuntando tímidamente una burguesía urbana.

En ese momento, entraron en escena otras fuerzas religiosas como el protestantismo y el espiritismo. La Iglesia fortalecerá su identidad e influencia frente al Estado Republicano y la sociedad laica tomando un gran impulso en la década de 1930 con un claro proyecto de neocristiandad, fenómeno común a todos los países latinoamericanos. Se trataba de cristianizar la república y fortalecer el espacio católico. (10)

En ese contexto las nuevas órdenes y congregaciones religiosas que empezaron a llegar a fines del siglo XIX, colaboraron con el episcopado en su proyecto de autoafirmación de la identidad católica en los más variados campos, como misiones en el interior, parroquias en los pequeños y grandes centros urbanos, obras de asistencia y promoción humana, hospitales, asilos, colegios, dirección de seminarios, prensa católica, etc. (11).

Los agustinos y los recoletos que llegan al país en 1899 van a desempeñar un papel importante en diversas regiones: las misiones en el interior de Goiás, Amazonas y Pará; fundaciones en São Paulo y en los Estados de Minas Gerais, Espíritu Santo y Bahía. Más tarde otras agrupaciones de inspiración agustiniana, inician su historia en otro contexto: las Agustinas Misioneras (1921), las Agustinas Misioneras Recoletas (1935), los Asuncionistas (1935), las Canónigas del Santo Sepulcro (1948), los Agustinos Descalzos (1948), las Agustinas Siervas de Jesús y María (1972), por citar algunas (12).

Dos acontecimientos cercanos entre sí motivaron la venida de los recoletos y agustinos al Brasil. Uno de ellos que ocurrió en 1898, fue la independencia de las Islas Filipinas de España, originando la expulsión de numerosos religiosos y sacerdotes españoles. El otro fue la realización del Concilio Plenario Latinoamericano de Roma, 1899, en que participó la casi totalidad del Episcopado del Continente. Fruto del encuentro de varios obispos brasileros con los superiores religiosos fueron los contratos para que varias congregaciones asumieran nuevos compromisos misioneros.

De esta forma, los agustinos y los recoletos se sumaban al caudal de reforzamiento de la romanización en el catolicismo brasilero, promovida por los "obispos reformadores", alineados con la Santa Sede, en los moldes del ultramontanismo muy en boga desde hacía medio siglo.



Los Agustinos Recoletos en el Brasil (18991912)

La venida de los agustinos al Brasil (13) fue concertada entre el Obispo de Goiás don Eduardo Duarte Dasilva y el Procurador General de la Congregación de Agustinos Recoletos, Fray Enrique Pérez de la Sagrada Familia. El primer grupo de misioneros fue destinado al Triángulo Minero, una de las regiones de la extensísima Diócesis de Goiás. Los catorce misioneros llegaron el 19 de febrero de 1899, bajo la dirección de Fray Mariano Bernard.

Al entrar en Uberaba, Minas Gerais, se dieron con la sorpresa de que el obispo, ausente a la sazón, había tomado la decisión de encargarles la dirección del Seminario Diocesano. Al no estar dentro del contrato anterior, se negaron a asumir esta responsabilidad, diluyendo el impase con propuestas alternativas.

De este modo se encargaron de las parroquias de Agua Suja, Ponte Nova y Sant'Ana do Río das Velhas. Con la llegada de nuevos religiosos, pudieron ampliar el radio de acción en el mismo Estado de Minas Gerais, asumiendo parroquias en no pocas ciudades: Santa Juliana, Veríssimo, Conceição do Araxá, Delfinópolis, Conquista, Monte Carmelo, Coromandel, Abadia dos Dourados, Estrela do Sul, Salitre, Patrocínio, São Francisco das Chagas de Campo Grande, y Sant'Ana dos Patos. Más tarde, llegaron administrar el Colegio Corazón de Jesús que funcionaba en la misma finca del Seminario de Uberaba.

Ulteriormente, llegaron otros grupos de misioneros que, prolongarían la presencia recoleta en los Estados de São Paulo, Espírito Santo y Pará (1899), y en Bahía (1900).

En São Paulo, entraron en Ribeirão Preto, que vendría a ser la casa central. En el Estado de Espíritu Santo, desarrollarían sus actividades en Serra, Nova Almeida, Anchieta, Piúma, Guarapari, Santa Cruz, Linhares, Conceição da Barra, Itaúnas, Vila do Itapemirim, Ibiaçu, y Fazenda do Centro. En el sur de ese Estado, desarrollarían un interesante apostolado con los inmigrantes italianos (14). Posteriormente, llegaron a Muqui, Cachoeiro y la propia capital, Vitoria.

Al norte en el Estado de Pará, comenzaron a instalarse en la capital, Belém, donde al principio administraron colonias agrícolas y, después, las parroquias de Monte Alegre, Tanajuri, Benevides, Santa Isabel y de inmediato otras en la Isla de Marajó. Entrando por el río Tapajós, realizaron una tarea pastoral más permanente en lo que sería en el futuro la Prelazia de Santarem.

En Bahía, donde ya habían estado sus cohermanos más próximos, los agustinos reformados entraron en 1971 a su capital Salvador, extendiéndose rápidamente por las parroquias de Matuim, São Miguel de Cotegipe, Monte Cruzeiro, Camaçari, Parafuso y Caravelas. Dirigieron el famoso santuario de Bon Jesus da Lapa, además de las parroquias de Barra, Cariranha, Riacho Fundo, Chiquechique y Santa Rita.

En la capital paulista, entraron en 1903, en los barrios de Lapa, Agua Branca y en 1905 Belém. Al cerrar estas obras, se dirigirían a Faxina (actual Itapeva).

Hasta 1905, habían llegado de España cerca de 83 religiosos. El Vicario Fray Bernard, dividió Brasil en tres regiones: Vicaría del Norte (Pará), del Centro (Espírito Santo y Bahía) y del Sur (Minas Gerais y São Paulo), dependientes de la Provincia San Nicolás de Tolentino, cuya sede provincial se encontraban entonces en las Islas Filipinas.

En 1907 se forma la Provincia Hispanoamericana de Nuestra Señora del Pilar, dentro de la cual se incluían las casas del Brasil. En el definitorio general se suprimieron las tres vicarías sustituyéndolas por subvicariatos, y se estableció la sede en Uberaba. En 1909 todas estas casas pasaron a la nueva Provincia de Santo Tomás de Villanueva.

El 16 de setiembre de 1912 por la Breve "Religiosas Familias" de Pío X, la congregación que ya llevaba una vida independiente de la orden de San Agustín se separó definitiva y jurídicamente, pasando a denominarse Orden de los Agustinos Recoletos (ORSA).



Viceprovincia del Santísimo Nombre de Jesús de Brasil

El Prior General de la Orden de San Agustín Fray Tomás Rodríguez, deseando abrir nuevos campos misioneros para sus religiosos, entró en contacto con diversos obispos brasileros con apoyo del superior provincial de la Provincia de Filipinas, Fray Manuel Gutiérrez. El Prior General trataba también de ese modo de renovar las provincias latinoamericanas agonizantes, como la de Perú, Colombia y Argentina (15).

No olvidemos la insistencia de los obispos brasileros con los superiores generales, en conseguir religiosos para su Diócesis carentes de sacerdotes para enormes extensiones territoriales.(16) El primer contrato se firmó con el obispo de Goiás Don Eduardo Duarte da Silva (15051899). En él los agustinos se encargaban de las parroquias de Catalão y EntreRíos, actual Ipameri.

Los primeros religiosos que llegaron a Brasil fueron los padres Joaquín Fernández, Alfredo Carrocera, Cándido de San Miguel, Baltazar Gamarra y el hermano de obediencia Maximiano Andrés que desembarcaron en Rio de Janeiro el 17 de julio de 1899. El 6 de julio tomaban posesión de la Parroquia de Catalão.

Según los cronistas y varias correspondencias, al principio tuvieron una serie de dificultades: todo era nuevo, al contrario de otros países del continente donde la orden ya se había establecido y mantenía una tradición (17). A la natural dificultad de la lengua había que añadir "la oposición sistemática de la prensa, que presentaba a los frailes como aventureros fracasados del Extremo Oriente que venían a sacar el dinero del pueblo, sobre todo a conquistar nuevas tierras para su patria" (18).

En Goiás los religiosos se dedicaron a misionar un ambiente donde "la religión estaba casi olvidada, siendo dominada por el protestantismo y la masonería". El desafío asumido será la defensa de la fe católica dentro de los moldes tridentinos, luchando al mismo tiempo contra la "ignorancia y la indiferencia religiosa". El clima era de lasitud, desorden y abandono por parte de la autoridad civil. Había constantes luchas de familias y partidarias como por ejemplo entre los Pires y Camargos, el típico "coronelismo" del Brasil denominado por los frailes "caciquismo político". Los religiosos se dedican inclusive a enseñar el uso del arado y a cultivar mejor la tierra. En Catalão permanecerían de 1899 a 1940. Catalão tenía problemas semejantes; se quedaron allí en 1899 a 1910, regresando en 1921 para salir en 1940.

Desde el principio, algo llamó la atención de los padres según testimonio de Joaquín Fernández, primer Vicario Provincial: "Entre los campesinos existe mayor temor de Dios y religiosidad".(19) Es esta una constatación hecha por los religiosos a lo largo de todas sus actividades, registrada en los innumerables "libros de Tombo" parroquiales.

Conocido el trabajo de los agustinos en Goiás fueron invitados por otros obispos a trabajar en sus diócesis: São Paulo, Mariana, Curitiba y Petrópolis. El mismo Internuncio les invitó a abrir una casa en Rio de Janeiro y en São Paulo con el fin de establecer cursos de Filosofía y Religión asumiendo la dirección de los seminarios.

A partir de esas solicitudes surgió el contrato con el obispo de São Paulo, Dn. Antonio Cándido de Alvarenga, en noviembre de 1899. La primera parroquia dirigida en la capital paulista fue la Iglesia de "Boa Morte" (18991904). Aceptaron también parroquias en lugares del interior: Nazareth Paulista, el Santuario del Buen Jesús de los Perdones (1900 1919). En el litoral: Santo Amaro (19001904), Iguape (19001919) y Xiririca (19081919).

El tercer frente misionero asumido por los agustinos fue la inmensa diócesis de Amazonas que contaba a la sazón con apenas 12 sacerdotes. En 1900 entraron en el Seminario Episcopal de Manaus. Habían recibido invitación para establecerse en Pará mas no fue posible aceptarla. Este pequeño grupo, que no pasó de 12 religiosos, formó desde 1903 la Viceprovincia del norte de Brasil, llegando a la región directamente de España. Su primer Vicario fue Blas Barrios. Regentaron 3 parroquias: Humaitá, Codajaz y Coari, todas de 1903 a 1912, cuando también se abandono la dirección del seminario.

En la diócesis de Mariana (Minas Gerais), uno de los centros de la reforma tridentina, se encargaron de las parroquias de San José de Río Preto (19001921), Vargem Grande (1900), Vilanova de Lima (19001902), San José de Tiradentes (19021922) y Prados (19051922). La tradición de las cofradías de laicos en esa región era muy fuerte. Estas hermandades habían mantenido vivo el espíritu católico en el tiempo de la minería, época en que la colonia portuguesa prohibió la entrada de las órdenes religiosas en Minas Gerais. Con la venida de varias órdenes y congregaciones a la región, al final del imperio y comienzo de la república, hubo muchos conflictos de jurisdicción en cuanto al modo de vivir la religiosidad. No faltaron tampoco momentos conflictivos entre los agustinos (20).

Desde su llegada, los agustinos no perdieron de vista su actividad preferencial: la enseñanza primaba. Abrieron dos colegios en São Paulo en edificios de propiedad de la Diócesis: uno en la capital (el primer "Colegio Santo Agostinho" del Brasil) y otro en Sorocaba juntamente con la parroquia "Nª Sª da Consolação" (19001904). Debido a la dificultad de mantenerlos, especialmente después de la Ley de Equiparación de la Enseñanza que encuadraba a los colegios religiosos en el modelo del Estado, decidieron cerrarlos. Por otro lado el mismo obispo Dn. Camargo Barros, se negó a ratificar el contrato.

Para compensar esta pérdida, y ante el reclamo del Vicario Provincial Fray Clemente Hidalgo fueron cedidas a la Orden las parroquias de Cruzeiro, donde se abrieron escuelas nocturnas para los hijos de los ferroviarios, como San Luis de Paraitinga, Cunha (19041908) y Brotas (1906) hasta 1990, fecha en que se entregó la parroquia más antigua de la Orden en Brasil. En Brotas funcionó de 1907 a 1916 un colegio denominado Santo Agostinho, cerrado después a causa de la precariedad de recursos y la escasez de alumnos.

En su visita canónica de 1908, el Provincial Fray José Laviana, determinó que se fundase una residencia y colegio en la capital paulista, para servir como casa central, con la finalidad de consolidar definitivamente la presencia agustiniana. En 1911 se iniciaba la construcción de la Iglesia de Santo Agostinho, en Morro Vermelho (actual Vergueiro). En 1929 se convertía en parroquia. Allí permaneció la sede hasta 1984 cuando se inauguró la nueva Residencia Viceprovincial (Nª Sª del Buen Consejo).

En 1910 tomaban posesión de las parroquias de Atibaia y Joanópolis (1922), en la Diócesis de Taubaté, recibieron las de Cruzeiro y de Bananal (19121922). En São Carlos do Pinhal, las de Dois Córregos (1919 que se mantuvo hasta 1990), Torrinha, Itajobi (19191940), Jaboticabal (19201940), y Taquaritinga (19251940).

En 1926 se creaba la Provincia del Santísimo Nombre de Jesús de España desmembrada de la Provincia de Filipinas. Las casas y misiones de Brasil y Argentina pasaron entonces a pertenecer a la Provincia recién creada. Esas circunscripciones permanecieron como Vicariatos hasta que en 1968 se crearon las Viceprovincias de Brasil y Argentina.

Los años de 19291934 son decisivos para la Viceprovincia ya que se concretaron obras de gran importancia, como la parroquia y el colegio Santo Agostinho (19291930); la misión de la Prelatura de Jataí, Goiás y varias parroquias en la Diócesis de São José do Río Preto (São Paulo).

La Prelatura de Jatai fue encomendada al Santísimo nombre de Jesús de España en junio de 1929, tomando posesión de ella el 28041931. Su primer Administrador Apostólico fue Fray Germán Vega Campón (18781861) consagrado obispo en 1941 (21). Pertenecían a la Prelatura las parroquias de Jataí, Río Verde, Caiapônia y Mineiros. Para vencer las enormes distancias el único medio de locomoción era el caballo. Además de dirigir las parroquias, los religiosos administraban escuelas y colegios del estado empeñándose en la construcción de iglesias, capillas y centros parroquiales, en esos remotos rincones. El ideal misionero continuaba siendo la defensa de la fe católica y formación en la "verdadera religión", contra las sectas protestantes, espiritistas y masones, "que sembraban la confusión, el indiferentismo y el distanciamiento de los deberes religiosos."

Debido al desentendimiento entre el Prelado y el Superior Religioso, la Provincia dejó la Prelatura en 1951, siendo asumida entonces con un nuevo contrato por los agustinos de Castilla.

En la Diócesis de Rio Preto de São Paulo, aceptaron las parroquias de Nueva Granada (19341939), Palestina (1934), Cedral (19341970), y Engenheiro Schmidt (19341970). En esta última funcionó de 1945 a 1960 el Gimnasio San José donde se pretendió implantar oficialmente un seminario con noviciado.

La preocupación por abrir un noviciado en Brasil ya aparece en 1927, encabezada por Fray Eustasio Esteban, Asistente General y después Prior General. En 1934 se iniciaron las obras en Engenheiro Schmidt, interrumpidas varias veces debido a la Guerra Civil Española, o a dificultades financieras. En 1938 la situación se agravó y las obras fueron totalmente paralizadas. Descontentos con esta situación los padres de la Viceprovincia escribieron en l944 una carta al Provincial pidiendo providencias inmediatas. Vino entonces la autorización para abrir no un noviciado sino una Escuela Apostólica. Fray Mariano de la Mata fue el principal entusiasta de esta idea, concretada efectivamente en 1960, cuando oficialmente se transformó en seminario menor. En 1970 se iniciaba un proyecto de formación común entre los cuatro grupos de agustinosOSA radicados en el país.

En 1961 se inauguraba en la ciudad de S. José do Rio Preto el Colegio São José que pasó por sucesivas reformas y modernizaciones hasta el día de hoy. En São Paulo fue regentada la parroquia de São Pedro Apóstol (19571970) y en 1969 se asumía la de Santa Rita de Cássia. Hubo también una presencia en Paravanaí (Estado de Paraná) desde 1967 a 1970.

En 1979, la Viceprovincia se lanzaba a los desafíos de la periferia de la Gran São Paulo, asumiendo la Parroquia de Jesús Resucitado. De 1981 a 1983 fue instalado en esa comunidad el Teologado Intervicarial. Dentro de la preocupación por la promoción humana y formación cristiana se abrieron en esa región otras dos obras, la Cuna Santa Rita (1985) y el Centro de Formación Amigos de San Agustín (1989).

En 1985, se abrió una nueva parroquia en São José do Rio Preto, Santa Rita de Cassia. Entre otras iniciativas, se encuentra la Clínica Mente y Corazón (atención sicopedagógica desde 1986) y la realización de las Pascuas Juveniles Agustinianas desde el 87. En 1989 se inauguraba la nueva residencia viceprovincial Nª Sª del Buen Consejo. Para 1992 se acordó la inauguración de la Casa del Niño P. Mariano.

En el capítulo Viceprovincial de 1985 se buscaron nuevos horizontes en una región donde no había una presencia agustiniana consolidada en el Estado de Paraná: Ponta Grossa y Curitiba, ambas parroquias. Pensando en el futuro con renovadas esperanzas en vista de la formación se construyó un Seminario Menor en Ponta Grossa; FilosofíaNoviciado, en Curitiba y el Teologado en São Paulo, sirviendo a la residencia de Sapopemba como Casa de Acogida.



Crece la Provincia Agustiniana en Brasil

De 1889 a 1930, la historia brasilera es conocida como la Primera República o República Vieja, con predominancia de la antigua oligarquía del café, descontenta con el régimen imperial y que realiza el movimiento republicano. Dentro de la misma oligarquía fue apareciendo una corriente que proponía nuevas inversiones y actividades en torno a la industria. Se iniciaba así en Brasil un lento proceso de industrialización y desarrollo de nuevas fuerzas sociales, como la burguesía urbana, los profesionales liberales, el proletariado, los sindicatos, las nuevas manifestaciones artístico literarias, actuación de nuevos partidos como el Partido Comunista Brasileiro, etc. La agudización de los conflictos desembocó en la llamada "revolución del 30" poco después del crack de la bolsa de Nueva York (1929). Depuesto el gobierno de Washington Luis, se iniciaba la Era Vargas, que gobernó dictatorialmente desde 1937 a 1945 en el llamado Estado Nuevo. La transición democrática se hizo de 1945 a 1950; en la década del 50 Brasil se embarcaba en el desarrollismo abriendo las puertas al capital internacional. De este modo se van gestando nuevos conflictos, y creciendo nuevas fuerzas sociales, que culminan en el golpe militar en 1964.

A partir de la década de los 30 la jerarquía católica, se proyectó cada vez más en el escenario nacional, insistiendo en garantizar el espacio católico buscando el apoyo del estado y de otras fuerzas sociales e influenciándolas al mismo tiempo. Además de continuar desarrollando las obras señaladas en el período anterior en el campo religioso y social (18891930), la Iglesia se vuelve con más fuerza para defensa del catolicismo a través de la legislación, de la "escuela católica" del "sindicato cristiano", de la formación social, con el desarrollo de la Acción Católica y el fortalecimiento de la intelectualidad católica.

En España la situación tampoco era nada tranquila. Durante la década de los 30 aparece profundamente perturbada, política, social y económicamente. La victoria del Frente Popular de las fuerzas de la izquierda revolucionaria (14041931), formó un gobierno dominado por el Partido Comunista con abierta persecución a la Iglesia claramente identificada con las fuerzas conservadoras.

La nueva constitución y leyes sucesivas someterían a las órdenes religiosas a un rígido control, además de procurar su extinción o completa desarticulación entre otros sectores en el campo educacional (22).

La política persecutoria llevó a la muerte a millares de clérigos y religiosos, debiéndose comprender ese "martirio" en el contexto más amplio de la Guerra Civil Española (19361939) que dejó un saldo de aproximadamente un millón de muertos. Sólo de la Orden de San Agustín fueron asesinados 108 religiosos.

En este contexto se comprende también la venida a Brasil de otros dos grupos de agustinos españoles en busca de nuevos campos misioneros y de protección para las jóvenes vocaciones. Son las Provincias del Sagrado Corazón de Jesús de Madrid (El Escorial) y de Castilla. Desarrollaremos rápidamente la historia de ambos colectivos hasta la actualidad, caracterizándolos de acuerdo a su autodenominación actual.



El Vicariato Agustiniano de Nuestra Señora

de la Consolación en Brasil

El segundo grupo de agustinos en llegar a Brasil fue el de los religiosos de la Provincia Matritense del Sagrado Corazón de Jesús fundada en 1895 (23). Hacía mucho tiempo que el Provincial Fray Isidoro Martín tenía la intención de fundar en el país. La ocasión surgió en 1928 cuando pasó por El Escorial un sacerdote gallego que trabajaba en el Brasil. Entusiasmado con las conversaciones, el Provincial escogió dos religiosos destinados a la Diócesis de Valença en el Estado de Rio de Janeiro. Estos pioneros fueron los religiosos Antonio Fernández y Manuel Formigo que llegaron a Brasil en setiembre de 1929.

Inicialmente trabajaron en la misma ciudad de Valença. Enseguida el Obispo André Arcoverde les encomendó la parroquia de Santa Teresinha en Rio Preto. Fray Manuel Formigo hubo de regresarse a España por motivo de salud y fue asesinado en 1936 en plena Guerra Civil.

En noviembre llegaba Fray Ricardo Rodríguez con el objetivo de abrir nuevos campos. El Obispo de Valença le ofreció la dirección del Seminario Diocesano. Al mes siguiente llegaba Wenceslao Martín.

De 1930 a 1933 arribó progresivamente un grupo numeroso de religiosos: Benito Prieto, Saturnino Casas, Andrés Pérez de Toledo (primer Vicario); Agustín Fincias, Marcelino García, Vicente Rabanal, Francisco Gil, Luciano Tobar, Juan Francisco Herrero; Victorino Turienzo, Pedro Martínez, Donato Fernández, Marceliano García, Manuel Martínez, Marcelino Barrio, Hilario Martínez y Amador Franco (24).

En 1931 se abrió en Rio de Janeiro la casa que sería madre de las demás: la Parroquia de São Paulo, Barrio del Marechal Hermes, cambiándose su nombre con la invocación de Nª Sª das Graças. Esta parroquia había sido regentada por los agustinos recoletos entre 1920 y 1931.

En 1932 en la entonces Diócesis de Belo Horizonte, Minas Gerais, tomaban posesión de la Parroquia de Bom Suceso, pequeña ciudad cerca de la capital, una vez clausuradas las actividades en el Seminario de Valença. En 1933 dirigirían en aquella ciudad minera un pequeño colegio.

En ese mismo año se abrió otra parroquia en la antigua capital federal Río de Janeiro: Nª Sª da Consolação, Engenho Novo. En España era nombrado Vicario Provincial Fray Carlos Vicuña, gran dinamizador de las fundaciones de ese período, principalmente del Colegio Santo Agostinho de Belo Horizonte (25).

Para la entrada de los agustinos y la fundación de un colegio en Belo Horizonte, el Obispo Don Antonio do Santos Cabral, puso la condición de que asumiesen también una parroquia de los suburbios de la ciudad: São José do Calafate (19341941). Después de dos años (193435) funcionó provisionalmente en el edificio Ginásio Santo Agostinho, en tanto se construía un edificio propio.

Durante dos años se dirigió un colegio en Cataguases en el interior de Minas (193435). A título de colaboración con la Arquidiócesis de Rio de Janeiro, a pesar de la falta de personal, fueron atendidas las parroquias vecinas de Marechal Hermes: Santa Isabel y São Sebastião de Bento Ribeiro (193438).

Debido a la Guerra Civil Española (193639), la Provincia Matritense tuvo una enorme baja en sus cuadros siendo de todas la provincias españolas la que sufrió más pérdidas por tener sus casas localizadas en Madrid, la región más conflictiva de la Guerra (26). De este modo un grupo de religiosos que trabajaban en Brasil y Argentina tuvieron que regresar a España para poder continuar las obras de la Provincia. Se hizo necesario cerrar la parroquia de Buenos Aires que dependía de esa Vicaría y, posteriormente, dejar Santa Isabel y São Sebastião de Bento Ribeiro (RJ); Bom Sucesso y Calafate (MG), entre (19411942).

Así la Vicaría se queda apenas con tres residencias en Brasil: las parroquias de Marechal Hermes (1931) y Consolação (1933) en Río; además del Colegio Santo Agostinho (1936) de Belo Horizonte.

El lugar ocupado por la antigua Iglesia de la Consolação en Río fue adaptado para una escuela primaria donde funcionó el Liceo Santa Rita de Cassia (19601988). Cerrado al no conseguir mantenerse, fue adaptado recientemente para centro pastoral. En 1951 se inauguraba en Belo Horizonte el Santuario Nossa Senhora da Consolação transformado en parroquia en 1961.

En el periodo de 1940 a 1960 la Vicaría brindó una importante ayuda financiera para el surgimiento de la Provincia Matritense. Fueron años de sacrificio tanto para la Provincia como para la Vicaría. Pasada la crisis volvieron a enviarse nuevos religiosos y consolidaron la presencia agustiniana en Rio de Janeiro y Belo Horizonte.

En la década de 1970 sucedió una revitalización de la Vicaría con el desarrollo y ampliación de algunas obras y también con la llegada de un grupo de religiosos jóvenes, algunos de ellos en etapa de formación. Se abrieron nuevas unidades del Colegio Santo Agostinho: Contagem, Ciudad Nueva y Calafate (éste último cerrado en 1985). De 1975 al 77 Fray Marcelino Barrio desarrolló un trabajo misionero en el Valle de Jequitinhonha, una de las regiones más deprimidas de Minas Gerais.

Un paso importante dado por la Vicaría fue un trabajo misionero asumido en la Prelatura de São Félix do Araguaia en el Mato Grosso, región marcada por frecuentes conflictos de tierras entre indígenas "posseiros" y hacendados. En el mismo año de 1981 se abría la parroquia Santo Agostinho, de Contagem, zona industrial del gran Belo Horizonte, entregada al obispo en 1988.

Un acontecimiento decisivo que vino a marcar radicalmente los rumbos de la Vicaria Matritense del Brasil fue la aprobación por el Capítulo General de 1983 de que la Vicaría asumiese la formación de los agustinos brasileros con las afiliaciones de los profesos solemnes ya existentes o con la adscripción de hermanos de otros grupos que quisiesen colaborar (véase más adelante La Formación en el Brasil).

A partir de entonces la Vicaría se responsabilizó de las casas de formación: el Seminario Santo Agostinho, de Bragança Paulista, un edificio menor y más funcional para las necesidades y la realidad local, juntamente con la parroquia Nossa Senhora Aparecida; la Fraternidad Agustiniana (Filosofado) y la parroquia Cristo Redentor, asumida por el proyecto intervicarial desde 1973. Se abrió el noviciado en la Consolação, Río (1984), trasladado posteriormente a Bragança Paulista (1987); desde 1990 reciben novicios de Chile y en 1992 de Chulucanas. El teologado permaneció al principio en Contagem para establecerse definitivamente en una nueva casa abierta en una zona obrera, en Diadema, São Paulo: Fraternidade Santo Dias (1988). Siempre ha habido profesos estudiantes en varias comunidades. De 1985 a 1988 la comunidad de Teología atendió también la Parroquia Santo Agostinho y las comunidades de Bom Jesús dos Palmares, en Ibirité.

Desde 1974 se vienen celebrando anualmente las Asambleas Vicariales realizadas dos veces al año a partir de 1984. Son momentos de convivencia, evaluación y planificación de la vida vicarial.

Además de la actividad educativa formal realizada en las unidades del Colegio Santo Agostinho y dinamizadas por la PEAC (Pastoral Educativa Agustiniana de Conjunto) se han abierto nuevas perspectivas en los colegios del Estado (por los profesos), apoyo a la formación de líderes y movimientos populares a través del fondo de Solidaridad Joreny Nasser Kheddy, fundación de la Escola Profissionalizante Cristo Redentor (1991). En 1987 participó en la fundación de un instituto intercongregacional para la formación filosóficoteológica, en Belo Horizonte: Instituto Santo Tomás de AquinoISTA. En 1992 se inició la construcción del futuro Centro Cultural Agustiniano.

En el campo de la asistencia social, promoción humana y evangelización se fundó en Marechal Hermes la Obra Social Santo Tomás de Vilanova (1990), iniciada desde 1981, conocida como la "Sopa dos Pobres". En la Consolação, Río, hay un proyecto de artes y oficios para menores llamado AIACOM (Armazém de Idéias e Ações Comunitárias).

En 1988, queriendo simbólicamente dar una nueva significación al caminar del Vicariato se cambió oficialmente su nombre por el de Vicariato Agostiniano de Nª Sª da Consolação do Brasil. Desde 1991 se estudia con el Vicariato de Bolivia la posibilidad de un trabajo de conjunto.



El Vicariato Regional de Castilla

En 1933 llegaba al Brasil el tercer grupo de agustinos procedentes de la histórica Provincia de Castilla (27). El motivo principal de su venida, como ya dijimos, fue consecuencia de las medidas anticlericales de la Segunda República Española.

En ese contexto se comprende más específicamente el deseo y la necesidad de abrir nuevos campos de apostolado en otros territorios. El Provincial de Castilla, Fray Angel Monjas partió para América recorriendo Colombia, Venezuela, Cuba y Puerto Rico y dejando como Vicario a Fray Juan García con la orden de fundar lo más pronto posible en cualquiera de estos países. A pesar de otras ofertas la fundación ocurrió en Brasil.

A su regreso a España, este Provincial se encontró con el Provincial de los Agustinos Recoletos que le ofreció dos parroquias dirigidas por ellos en la Diócesis de São José do Rio Preto. Y así, con aprobación del Definitorio salieron para el Brasil en compañía del padre Monjas los padres Fray Manuel Campelo, Fray Antimo del Pozo y Fray Matías Boñar.

Se firmó un contrato con el obispo de Rio Preto, Dom Lafayette Libânio, según el cual los agustinos recibían las parroquias de Santa Adélia, Pindorama, Ariranha y las anexas de Fernando Prestes y Cândido Rodrígues. Inmediatamente después llegaba Fray Juan García procedente de Puerto Rico. Con la llegada de los padres Aurelio Alvarez, Celestino Cabrero y Francisco Abril fue posible aceptar las parroquias de Mirassol y Tabapuã.

A los pocos años el Vicariato se había extendido por las Diócesis de Rio Preto y Bragança Paulista. En 1933 Fray Juan García realizaba un contrato con el obispo de Bragançã PaulistaSP, mediante el cual la Vicaría se encargaba de las parroquias de Perdões (193366), junto con el santuario del Senhor Bom Jesus e Nazaré Paulista (193340). En Perdões se realizó una experiencia, aunque efímera, de una Escuela Agrícola; al año siguiente fue aceptada la parroquia de Atibaia (193458). Las tres habían sido atendidas por los padres de la Viceprovincia. Hasta 1935, el número de nueve parroquias era superior al número de religiosos necesarios para la constitución regular de comunidades.

Las determinaciones de la visita general de Fray Clemente Fuhl, en 1935 y las bajas ocasionadas por la Guerra Civil española, obligaron a cerrar algunas parroquias. Cuando se comprobó la imposibilidad de conseguir la de Catanduva, destinada para sede del Vicariato, se intensificó el movimiento para rescindir el contrato.

Con mucha dificultad se consiguió la recisión del contrato con la Diócesis de Rio Preto, permaneciendo apenas las parroquias de Bragança Paulista. Más tarde se inició la actividad docente con la dirección del Colegio Diocesano São Luis (19381968) en Bragança Paulista.

Debido a las dificultades que ponía el gobierno comunista, comprometiendo la continuidad de los estudios de los candidatos al sacerdocio al obligarles al servicio militar antes de la ordenación, el Provincial y su Consejo decidieron enviar 8 estudiantes de Teología en edad de servicio militar, acompañados por tres padres y un hermano de obediencia. Llegaron a Brasil en el mismo año de 1933, concluyendo sus estudios en Bom Jesus dos Perdões. El celo de los padres restauró e incrementó la devoción al Señor Bom Jesus, creando nuevas asignaciones y dinamizando la vida parroquial mereciendo destacarse la obra de Fray Juan Pastrana.

Fracasado el intento de fundar en PiracicabaSP, en 1939 se encargaban de la parroquia de Santo Antônio, en CampinasSP, firmándose el contrato definitivo en 1952 y localizada en un barrio ferroviario. Se conserva hasta hoy esta parroquia, en el transcurrir de los años fue adquiriendo un extraordinario dinamismo y significado la Arquidiócesis de Campinas. Ultimamente se construyó allí un gran Centro Social (1992).

En 1952, por orden del Prior General, Fray José Hickhey, se comenzó la construcción del primer seminario agustiniano del Brasil. El proyecto inicial tenía un carácter intervicarial. Debido a las dificultades en llegar a un acuerdo común, no se pudo llevar a cabo. El Vicariato de Castilla resolvió entonces asumir la obra. En 1959 el Provincial Fray Honorio Gutiérrez, inauguraba el primer pabellón iniciándose el curso con dieciséis aspirantes. En 1969, se reinició la tentativa de un nuevo proyecto intervicarial de formación destinándose el Seminario de Bragança para los seminaristas de diversas instituciones del Brasil. Se realizaron así los dos primeros Noviciados (196870). Por fin el Seminario cerró sus actividades en 1983.

Con la intención de fundar una casa central del Vicariato en la capital paulista, se dio entrada en São Paulo en 1939 en el Bairro do Belém, comenzando por atender varias capellanías, permanecieron interinamente hasta la decepcionante decisión del nuevo Arzobispo de no aceptar religiosos de la misma Orden y diferentes Provincias; se dirigieron entonces a Campinas.

Los religiosos pudieron retornar en 1947, erigiendo la primera casa en la Parroquia de São Carlos Borromeo (1948), iniciando en 1960 el acariciado sueño de la dirección de un centro docente con la inauguración del Colégio Agostiniano São José. En 1969 se compraba el inmueble perteneciente a las Irmãzinhas da Assunção, que vendría a ser el Centro Agostiniano de Espiritualidade (196978). Más tarde a través de un nuevo proyecto se inauguraba el Colégio Agostiniano Mendel, que se comenzó a construir en 1982 y se inauguró en 1984; allí funcionó hasta 1990 otro Centro Agostiniano de Espiritualidade.

Ligada a la Comunidade do São Paulo, está la Chácara Tagaste lugar de retiro y reposo. En diciembre de 1980, se decidió ampliar las obras de asistencia y promoción humana instalándose la Creche Santa Rita de Cássia en São Paulo.

Cuando los Agustinos de la Viceprovincia abandonaron la Prelatura de JataíGoiás, en 1951 le fue ofrecida a la Provincia de Castilla. El Provincial Fray Pedro Moratiel designó inicialmente para esa misión a los Padres Juan García y Manuel Prieto, con el encargo de atender Rio Verde (195169) y Caiapônia (195159), inmediatamente fueron destinados 11 religiosos jóvenes más asumiéndose Jataí y Mineiros. En aquella época la extensión de la Prelatura era de 87 mil Km2 y cerca de 150 mil habitantes. Los problemas surgidos al principio fueron la invasión y expropiación de tierras de la Prelatura debido a descuidos en la administración. El acento pastoral se ponía en la salvaguarda de la fe contra los espiritistas, masones, protestantes y la indiferencia religiosa. De junio a noviembre aprovechando el período de la sequía, se hacía la gira parroquial por las capillas rurales y las haciendas más distantes.

Exonerado de sus funciones el anciano don Germán Vega fue sustituido por don Abel Ribeiro, siendo esta Prelatura elevada a Diócesis en 1957. En esta ocasión se solicitó la liberación de los compromisos anteriormente asumidos y paulatinamente se abandonaron las parroquias, saliendo el último religioso en 1965.

En 1953, recibían la invitación del Arzobispo de Goiás, para establecerse en la capital Goiânia, lo que se llevó a cabo en 1954 con el trabajo de varias capellanías hasta que les fue entregada la Parroquia de Nª Sª de Fátima al año siguiente. Después de una accidentada historia decidieron construir la nueva sede donde hoy se encuentra (197074), proyectada especialmente dentro de las modernas concepciones de la capital. Posteriormente se construyó el Centro Social y el Colegio Agostiniano, que comenzó en 1957 como curso de alfabetización de adultos (195759). Después de diversas vicisitudes se inauguró el nuevo edificio y los cursos en 1964, pasando después por sucesivas ampliaciones y remodelaciones.

Entre otras obras y actividades en Goiânia se encuentran la Chácara Recanto Agostiniano (1978) y la Creche Santa Rita de Cássia (1985). En 1985 se retomaba el trabajo vocacional con la realización de una serie de encuentros vocacionales. En 1990 se inauguraba el Seminario Mãe do Bom Conselho.

En todos estos años de historia el Vicariato ha contado con la presencia de 71 religiosos.



Nuevas inquietudes y desafíos

Como ya explicamos, los agustinos al colaborar con la Iglesia de Brasil absorbieron todo el impulso de la fuerza católica marcada por un fuerte estilo apologético y defensivo: masonería, protestantismo, espiritismo, ignorancia e indiferencia religiosa eran los culpables de todos los males. El trabajo pastoral se desarrollaba en la reforma y construcción de templos, escuelas, y centros sociales, al menos en el período de 19301970. La vida cristiana se concentraba en la práctica sacramental, para lo cual existían numerosas asociaciones bajo la autoridad vigilante del sacerdote.

En ese trabajo de carácter parroquial y misionero fue donde los religiosos se aproximaron más al pueblo simple y pobre, unas veces descubriendo y valorizando su religiosidad tradicional y, otras, condenándola como ignorancia y superstición. Así lo demuestran las misiones del Amazonas, Goiás, São Paulo y Minas Gerais.

Entre las Asociaciones de Laicos creadas, dinamizadas o reestructuradas encontramos las siguientes: Sagrado Corazón de Jesús, Hijas de María, Jóvenes Marianos, Congregación Mariana, Santos Angeles, Cruzada Eucarística Infantil, Propagación de la Fe, Catequistas, Doctrina Cristiana, Asociación de San José (vocacional), Liga Católica, Conferencias de San Vicente de Paul, Jueves Eucarísticos, Hermandad del Santísimo Sacramento, Obra de los Sagrarios, etc.

Los Agustinos traen devociones típicas de la Orden que reflejan esa práctica sacramental y clerical, que después serán ampliamente adoptadas por el pueblo. Así tenemos la devoción a Ntra. Sra. de la Consolación y Correa, con otras numerosas Archicofradías y Cofradías que se extendieron rápidamente por todo el país; Santa Rita de Cássia con los famosos Talleres de Caridad; Conferencias de San Nicolás de Tolentino y San Juan de Sahagún. De menor importancia, aunque bastante extendidas son las devociones a Santa Mónica y a Ntra. Sra. del Buen Consejo. En un primer momento desempeñan papel fundamental los propios religiosos con la fundación de cofradías, distribución de estampitas, folletos, manuales, "santinhos", etc. Pueden ser citados entre otros: Fr. Domingo de Lemos, Fr. Mariano de la Mata, Fr. Saturnino Casas, Fr. Agustín Fincias, Fr. Juan Pastrana, Fr. Manuel Prieto. Un segundo momento se caracteriza no tanto por la influencia de los sacerdotes sino por la búsqueda del propio pueblo que asume como propias estas devociones divulgándolas por cuenta propia.

Era un momento en que la mayoría del pueblo vivía en el campo, y abundaban las capillas rurales asistidas por el párroco en sus famosas giras parroquiales, legitimando matrimonios, bautizando, haciendo primeras comuniones; se organizaba la catequesis y se celebraban las fiestas patronales. El pueblo creyente siempre valorizó la presencia y actuación de los sacerdotes, teniendo un especial cariño a los agustinos.

La Iglesia del Brasil contaba entonces con el fervoroso dinamismo de la Acción Católica. Pero, según nos consta, era reducido el trabajo desempeñado por los agustinos en ese tipo de pastoral, preocupados más en consolidar su presencia y fortalecer sus obras.

El día 1º de abril 1964 dieron un Golpe de Estado, estableciendo en Brasil una dictadura que perduraría hasta 1984, cuando se realizó la llamada "transición democrática, gradual y pacífica", inaugurando el período que las clases dirigentes llamaron la Nueva República. En ese conturbado período serán diversas las posiciones por parte de la jerarquía. Hubo obispos partidarios del régimen militar, mientras la gran mayoría oscilante en un principio fue tomando conciencia de lo que acontecía en el país; un sector, más radical y crítico, ya desde los primeros años asumió una actitud profética de denuncia contra los asesinatos y terrorismos tanto de derecha como de izquierda.

A partir de Medellín (1968) ganaron fuerza las Comunidades Eclesiales de Base (CEBs), respaldadas por la reflexión de la Teología de la Liberación, despuntando pastorales de cuño más popular: se multiplicaron los institutos de líderes populares, investigaciones, catequesis y otros. Con Puebla (1979), "la opción preferencial por los pobres", despertará a las congregaciones religiosas para nuevos desafíos en el servicio del Evangelio.

¿Qué actividades desarrollaron en Brasil los agustinos en las décadas del 60 y 70? Básicamente el peso estaba en las actividades parroquiales y en los colegios, destacándose la experiencia del proyecto de formación intervicarial (FABRA). No escatimaron esfuerzos en modernizarse tanto en las parroquias como en los colegios, además de lanzarse con entusiasmo el trabajo de los nuevos movimientos, como Cursillos de Cristiandad, Entrenamiento de Líderes Cristianos, Encuentros Matrimoniales, Encuentros de Jóvenes con Cristo, Equipos de Ntra. Señora, Movimiento Familiar Cristiano, Encuentros de Oración, Renovación Carismática Católica (RCC), y otras tantas campañas promovidas por la Iglesia en el país.

En general, se mantuvieron apartados de las actividades que tuviesen algun carácter o connotación política más explícitos. La opción por los pobres ha sido comprendida de distintas maneras, desde el tradicional asistencialismo, pasando por la promoción humana hasta la formación de líderes y apoyo a la pastoral popular. A partir de los 70, unos y otros intensificaron su participación en actividades y organismos de la Conferencia de Religiosos de Brasil (CRB). La década de los 80 se caracterizó por la iniciativa de presencia en áreas de misión y en las periferias de las grandes urbes, en un contacto más próximo con la miseria, no sin conflictos con las opciones de mantenimiento de las actividades tradicionales.

Al comienzo de ese nuevo período, llegó un nuevo grupo de agustinos de la Provincia de Malta, cuya historia narramos a continuación.



El Vicariato Agustiniano de la Provincia de Malta

En el verano de 1960 el maltés, P. Fulgencio Galea, terminando de rezar el Santo Rosario en la Plaza del Vaticano, continuó paseando solo bajo el columnato de Bernini y se encontró providencialmente con el salesiano P. Juan Tomás de Tres Lagunas (MS). El diálogo versó sobre las necesidades espirituales de su Diócesis de Campo Grande por la falta de sacerdotes. Regresando a Malta de vacaciones, el P. Fulgencio compartió esta inquietud con el Provincial P. Mariano Sammut, y éste juzgando el encuentro como un camino abierto para un futuro campo de apostolado, después que la misión en Africa del Norte fue restringida a la sacristía, resolvió entrar en conversaciones con el Prelado de la Diócesis don Antonio Barbosa para que éste hiciese una propuesta para un futuro ingreso en su Diócesis. Aún en setiembre de 1960, don Antonio escribió al Provincial: "Sean bienvenidos a mi Diócesis". Mas la respuesta definitiva debería demorar un poco, ya que en julio del año 1961 se elegiría un nuevo Provincial. El tema fue asumido por el P. Ugolino Gatt con entusiasmo y dedicación. Y en este clima continuó la correspondencia entre la Provincia y la Diócesis de Campo Grande.

El 15 de diciembre de 1962, es un día histórico para los agustinos de Malta: desembarcó el P. Paolo María Spiteri acompañado por el Provincial P. Ugolino en el Aeropuerto de CongonhasSP. Después de haberse hospedado en el Colegio Santo Agostinho de la Provincia de España, tomaron el avión rumbo a Tres LagunasMS, asumiendo la parroquia de Villa Piloto dos días más tarde. Esta Villa estaba destinada a albergar a los trabajadores de la central hidroeléctrica de Urubupunga y sus respectivas familias de modo provisional hasta tanto que fuese construida la primera etapa de la usina. Cuando la población se trasladó a Isla SolteiraSP (segunda etapa) los padres se vieron obligados a abandonarla a mediados del 68. No hay duda que aquí se resumen todas las actividades asumidas por la Provincia de Malta en Brasil a lo largo de 30 años y de las cuales pretendemos dar un resumen en las páginas siguientes.



PARANAIBAMS

Con carta fechada el 05 de marzo de 1963, don Antonio llamó a los agustinos a trabajar en una parroquia de su Diócesis de Campo Grande instalada en los años 1835 y que tenía como patrona a Ntra. Sra. del Rosario y más tarde a Santa Ana que dio nombre geográfico al Municipio de Santa Ana de Paranaiba, distante de Villa Piloto unos 200 Km. Esta jurisdicción comprendía la parroquia de Cassilandia y de Bom Jesús, en el Municipio de Inocencia, ambas distantes de ella, unos 95 km. Tenían estos tres municipios un carácter agropecuario. El trabajo era desafiante y agotador debido a las distancias y a las carreteras no pavimentadas. Durante estos 30 años los sacerdotes que pasaron por Paranaiba realizaron construcciones de salones, iglesias, centros comunitarios, muchas a expensas de importantes aportes financieros de Adveniat y Miserior. En el aspecto social los padres iniciaron la construcción de un asilo de ancianos con una capacidad de 96 camas y la institución y asociación de los deficientes físicos de Paranaiba que es la segunda institución en todo el Estado de Mato Groso. Sumas considerables en dinero y especies se han recibido de los familiares y amigos de los religiosos en Malta, Australia, Roma, Inglaterra, Alemania y Canadá, para este trabajo de asistencia social, parejo a la atención religiosa.

Otra empresa confiada a los Padres fue la dirección del Patronato San José. Se trataba de una institución filantrópica religiosa que tenía como objetivo educar social y religiosamente a los menores pobres y los de la zona rural. El edificio de dos pisos tenía dos salas, un refectorio grande, dos dormitorios, y una cocina. Y esto facilitó la realización de muchos cursos y talleres agrícolas para los jóvenes de zona rural, también aquí los padres aprovecharon para hacer trabajo pastoral. Por falta de recursos humanos y de los muchos requerimientos burocráticos la Provincia cerró el Patronato y orientó a los Padres a otras actividades pastorales.

Como las tareas iban siendo cada vez mayores los Padres invitaron a las agustinas maltesas Siervas de Jesús y María a trabajar en la parroquia al lado de las hermanas Franciscanas de Siessen que llegaron aquí en tiempo en que los frailes Franciscanos Menores servían a esta parroquia. Las primeras cuatro agustinas llegaron el 21 de diciembre de 1972. De inmediato dos de ellas se responsabilizaron del movimiento regular y de la organización de la Santa Casa de Misericordia que se hallaba en una situación precaria; las otras dos se dirigieron al municipio de Inocencia tomando posesión de aquella parroquia en formación que era atendida por los padres una vez al mes.



CASSILANDIA MS

Desde 1963 hasta 1969 la parroquia de San José contó con la visita del Padre semanalmente tal y como era la costumbre de los Franciscanos; pero en diciembre de 1969, al concluir la construcción de la casa parroquial, la Provincia destinó dos padres para formar una nueva comunidad religiosa sirviendo a diario aquella parroquia con los centros más poblados del mismo municipio: Indaia do Sul (80 km), Baus (150 km) y Paraíso (80 km). La pequeña capillita dio lugar después a la construcción de una grande Matriz que fue inaugurada el 19 de marzo de 1968 el día del santo patrono. Acompañando el progreso el municipio creció también en necesidades espirituales. Dos iglesias grandes más fueron construidas en los barrios de San Joaquín y Buen Jesús con sus salones y dependencias. Aun cuando los caminos presentaban muchos peligros para viajar los agustinos nunca dejaron de atender las comunidades lejanas mencionadas y otras que fueron surgiendo a lo largo de estos años como por ejemplo "Chapadao do Sul" (100 km), Santa Luzia (25 km), Santa Rita de Cássia (10 km) y Comunidade da Fazenda Campo Bom (114 km), y también otra en el Alto Tamandare (28 km). Las carreteras y caminos asfaltados hoy fueron testigos de largas horas de caminata cargada de sorpresas en sus caminos que los bandeirantes abrían conforme a las exigencias del progreso.

La parroquia tenía una escuela construida al lado de la Iglesia Matriz, mas para dar espacio a la plaza municipal fue trasladada a un área mayor un poco más distante. El Padre fue el orientador de la directoría de este primer establecimiento de enseñanza de este municipio. Además de las tareas pastorales, los agustinos se desempeñaron como profesores colaborando con la educación aun en la época en que el curso normal estaba en riesgo de desaparecer. Uno de los hermanos salvó la situación asumiendo la dirección.

Por razones prácticas la Provincia se vio obligada a abandonar esta parroquia el 6 de diciembre de 1987. Lo mismo hizo con otra en el Alto Tamandare (28 km).

A mediados de 1963 el Arzobispo de Belo Horizonte don João Rezende Costa envió un recado para el Superior de la Misión Agustiniana a través del secretario de la conferencia de los religiosos del Brasil diciendo que necesitaba padres para trabajar en uno de sus barrios de su diócesis. Después de la autorización del Provincial uno de los padres visitó personalmente el barrio de Aarao Reis y vio allí el comienzo de la construcción de una iglesia dedicada a San José Obrero.

El 17 de abril de 1965 tomamos posesión de la dirección de esta iglesia que luego fue convertida en parroquia con todos los derechos eclesiásticos. Con la presencia de los religiosos el pueblo se animó tanto que continuaron la construcción de la iglesia e iniciaron la casa parroquial y un salón de fiesta que sirvió también durante mucho tiempo como jardín de infancia bajo el patrocinio de Santa Rita de Cassia.

Estas comunidades cambiaron tanto que hoy en día son parroquias autónomas. Brasil, con la llegada de esta ciudad minera dice "¡Oh que bello horizonte! los agustinos tenemos también razones para agradecer a Dios y exclamar ¡Oh que bello horizonte!" (Belo Horizonte para nossa Missao), (Homilía a los jóvenes el 01 de julio de 1980). De hecho en el transcurrir del tiempo la parroquia creció tanto que los padres tenían que atender otros barrios como São Gabriel, Guaraní, Previdencia, Heliopolis, don Silverio, Guaruja, Urca y Minaslandia. En estos últimos tiempos nos alegraron bastante las noticias de que muchas de estas comunidades se desarrollaron tanto que hoy en día son parroquias autónomas.

En el año 1974 el Obispo de Campo Grande (MS) don Antonio Barbosa conociendo el celo misionero de los malteses quería confiar a los agustinos malteses una parcela más de su diócesis, la Aparecida do Taboado. Considerando que la Provincia no tenía más miembros disponibles en Malta y las tres parroquias (Paranaiba, Inocencia y Cassilandia) de MS y las dos de São Paulo ya bajo nuestra responsabilidad eran excesivamente extensas para los pocos sacerdotes que en ella trabajaban, los superiores prefirieron entregar la parroquia de Belo Horizonte y asumir la de Nª Sª de Aparecida de MS. Esta decisión fue más conveniente para nosotros ya que esta parroquia estaba también en MS.

Muy gratos recuerdos nos han quedado de la generosa colaboración de los fieles y la población minera con nosotros y nuestras obras, y satisfechos de que "como siervos inútiles hicimos aquello que debíamos hacer" (Lc. 17, 10). A fines de 1975 dejamos la capital minera cargados de nostalgia y de profundas experiencias pastorales.



APARECIDA DE TABOADO MS

La parroquia que la Provincia asumió por último es la de Nª Sª de la Aparecida en Aparecida do TaboadoMS el 20 de junio de 1975. El inicio del trabajo en esta parte de la Diócesis de Tres Lagunas fue el resultado de la entrega de la Parroquia de San José Obrero en Arao Reis en Belo Horizonte.

Después de largos años de trabajo los hermanos capuchinos entregaron la parroquia a don Antonio Barboza S.D.B. Para facilitar la aproximación de las comunidades religiosas que eran tan dispersas (São PauloMato Grosso do SulMinas Gerais), la Provincia aceptó la invitación de don Antonio y aceptó este compromiso. Durante los 16 años las comunidades de San José (2 Km), Santa Rita de Cássia (9 Km), Bon Jesus (32 Km) fueron reactivadas, en tanto que surgieron otras como San Jerónimo (3 Km), San Lázaro (3 Km), San Sebastián (4 Km), San Agustín (35 Km.) y San Juan Bautista (33 Km).

A la pequeña iglesia le sustituyó un nuevo y espacioso templo que respondía a las exigencias litúrgicas postconciliares. En 12 años consecutivos los agustinos acompañaron al pueblo acogedor de Aparecida do Taboado en la demolición de la iglesia y con el auxilio de Adveniat y constantes aportes locales levantaron la nueva con salones y casa parroquial que fue inaugurada el 16 de febrero de 1988.

La Iglesia de San Cristóbal tiene un bello jardín público que hace destacar más aún la fiesta tradicional de este patrón de los choferes. Con la llegada de los agustinos el trabajo pastoral se hizo más amplio, ya que incorporó un gran número de laicos comprometidos y dispuestos a los nuevos desafíos de las comunidades en el día de hoy. Ello facilitó la instalación de cursos bimestrales de novios, de orientación religiosa para padres y padrinos de niños bautizados, preparación intensiva de los jóvenes para la confirmación, encuentros de matrimonios como también las reuniones dominicales con jóvenes y adolescentes. Este múltiple trabajo apostólico estaba orientado por los documentos de la CNBB y de la Iglesia Latinoamericana que hacía que los padres vieran su pastoral como un compromiso preferencial con los más desfavorecidos y marginados. Este municipio pertenecía entonces al Estado de Mato Grosso cuando en diciembre de 1978 uno de los agustinos tuvo la satisfacción de participar en el curso de entrenamiento para profesores y técnicos en enseñanza especial de Cuyabá. El llevó a este encuentro estadual la reivindicación que los excepcionales de Aparecida no podían permanecer por más tiempo escondidos y olvidados por la sociedad en pleno siglo XX y fue creada en pocos meses la clase especial, simiente que creció en A.P.A.E. tan bien organizada y luchadora en esta causa justa que todo aparecidense admira y apoya. En 1987 fue fundado en esta parroquia el movimiento ecuménico de la FCD (Fraternidad Cristiana de Enfermos y Deficientes). Esta entidad internacional ve a la persona total del enfermo y del deficiente tratando de recuperar sus valores de amor a la vida, gratuidad en las relaciones, compartir los bienes con las personas enfermas o sanas, superación del egoísmo, etc. La fundación de este movimiento y otros trabajos promocionales humanitarios realizados y apoyados por los agustinos son la respuesta evangélica a la exigencia del fundador San Agustín cuando dice: "Examínate a ti mismo, mira de dónde procede el amor que tienes al prójimo y verás a Dios en cuanto es posible" (Tract. In Joan. 17, 8). Siendo ya confiadas desde 1963 a los agustinos las parroquias de Paranaiba y Cassilandia dedicadas a Santa Ana y San José respectivamente (Madre y esposo de la Virgen María), faltaba la Aparecida do Taboado que, como dice el cantar regional, tiene por Patrona a la misma de la nación.

Jardín San Francisco Parque Nuevo Mundo

Sao PauloCapital

En 1965 llegó a conocimiento de los Padres que una familia estaba ofreciendo un terreno en un barrio del centro de la ciudad donde debía construirse una iglesia. Como los Padres estaban trabajando en distancias muy grandes (Mato Grosso do Sul y Belo Horizonte), se necesitaba una residencia que facilitara sus encuentros. En julio del mismo año la Provincia recibió una donación de dos lotes en un total de 1,586 mt2 en el Parque Nuevo Mundo Jardín San Francisco de la paulista doña Adolorata Tangangello y en la Curia Arquidiocesana fue registrada el nombre de la patrona de esta comunidad naciente como Santa Rita de Cassia. La erección canónica de esta parroquia aconteció el 21 de setiembre de 1968, mas solamente el 28 de marzo de 1969 los Padres fueron a vivir definitivamente en este barrio en una casa alquilada por los moradores que tanto esperaban esta buena nueva. Dos días después durante la misa campal en el terreno de la futura construcción, el obispo don Evaristo Arns presentó a los padres a los habitantes de la zona diciéndoles que tuvieran certeza de que todo el mundo iba a beneficiarse con la presencia de estos luchadores que habría de beneficiar a la colaboración y unidad de todos.

El barrio Parque Novo Mundo es un distrito de Villa María situado entre la autopista Dutra y la marginal Tiete a unos 18 Km de la capital en la Región Norte. Barrio muy pobre y en medio del bosque. Desde el comienzo los Padres animaron al pueblo para sus mejoras sociales. El 4 de febrero de 1970 la representación de "amigos del barrio" tenía la desgracia de escuchar que "la Prefectura no podía gastar dinero en un barrio tan atrasado". El Padre que les acompañaba después de haber escuchado indignado aquellas palabras pacificó su ánimo con las palabras del Señor: "Perdónalos porque no saben lo que hacen" (Lc. 2334). El estado calamitoso del barrio fue tema de los periódicos y del canal 13 de televisión durante muchos meses después pero sin el menor indicio de mejoría. Nada de esto desanimó el trabajo de los Padres ni la "caminata con fe y el pie en la calzada" de la comunidad naciente. Mientras los Padres sufrían la sequía en el tórrido Mato Grosso do Sul, estos sus hermanos estaban con el agua al cuello para poder salir de la pequeña casa parroquial alquilada. La Comunidad se unió a la construcción del Ponte de Suspiro y el Ponte de Begonia que daban acceso a la capilla provisional. En la reunión del Consejo Parroquial del 24 de octubre de 1969 el Obispo de entonces don Paulo Evaristo se arriesgó diciendo: "Si ustedes comienzan y terminan la capilla antes de Navidad yo mismo vendré a inaugurarla". Una semana antes de Navidad la comisión de la construcción comunicó a don Paulo que todo estaba a punto y él era el invitado especial a la inauguración.

Cumpliendo su palabra ahí estaba don Paulo aquella mañana navideña de 1969 en medio del pueblo humilde y en presencia de los padres agustinos de las diversas provincias, sacerdotes de la región, religiosas, y muchas autoridades para celebrar la misa inaugural en la capilla que incidentalmente fue bendecida con agua bendita. Esta unión del pueblo entusiasmó a todo el mundo y se hicieron más evidentes las mejoras sociales y religiosas en el área. Encontramos hoy una iglesia muy espaciosa, salón comunitario con diversas salas anexas, casa parroquial y seminario, todo fruto de donaciones exteriores y donantes locales.

Los padres dan también asistencia social y pastoral al Jardim Andaraí, Parque Vila María y a la Favela Vila San Juan Bautista que, a su llegada 24 años atrás eran pequeñas y hoy se han ido transformando en grandes comunidades con auxilio de las congregaciones de San Vicente, seminaristas, carmelistas, y lazaristas que toda la semana tienen actividades religiosas y culturales en Promorar Curuca, Promorar Jardim Novo Mundo, São José y en las comunidades Cidade Nova y Massari.



Parroquia de Nuestra Señora Aparecida

de Boa Viagem Parque Novo Mundo

El día 11 de agosto de 1972 el provincial P. Alberto Borg tuvo la oferta de don Pablo Evaristo para que trabajáramos en otra parroquia de su Diócesis. Se trataba esta vez de la Parroquia de Nª Sª. Aparecida da Boa Viagem instalada el 11 de febrero de 1958 y situada en lo alto del Morro al lado de la autopista Dutra en el Parque Novo Mundo. El Provincial se encontraba en una situación delicada: de un lado la gran Parroquia de Santa Rita de Cassia necesitaba ser atendida por dos padres, sólo uno de los cuáles estaba en condiciones de moverse; y, de otro, el insistente pedido del Obispo. Junto con los dos padres aceptó esta nueva misión. El P. Jaime que era el vicario episcopal de la región noreste entregó las llaves de la iglesia matriz y de la casa parroquial el 23 setiembre de 1972. Siendo pequeña la distancia entre las dos parroquias y siendo diversas las dificultades como alquiler, locomoción, las carreteras siempre alagadas, etc., los padres decidieron ocupar la Casa Parroquial de Morro, mientras se dividiera de la mejor forma posible todo el trabajo. Esta nueva parroquia estaba compuesta de dos colonias numerosas de portugueses y japoneses al lado de los brasileros que cada día afincaban más sus destinos de esperanza en este barrio promisorio.

Los migrantes portugueses implantaron sus costumbres culturales y religiosas en esta parroquia y la fiesta tradicional del 13 de mayo se hizo la ocasión anual donde podía expresarse con toda libertad. Por otra parte los brasileros se esfuerzan para que el día 12 de octubre sea el día más importante en la vida de la comunidad y de cada cristiano iluminada por la bondad y grandeza de la Madre Morena, Nª Sª Aparecida; se necesitaba toda la diplomacia del padre para unir estas dos culturas maravillosas e importantes. La unión en el trabajo pastoral es una cosa maravillosa que destaca en las actividades de los movimientos Bicentinos, Encuentros de Matrimonios Jóvenes etc. El cuadro de Nª Sª Aparecida en el azulejo de la fachada de la iglesia es el mayor estímulo de fe para los millares de choferes que día y noche viajan por la Rodovía Dutra. A fines de 1983 con el regreso de dos misioneros a Malta la provincia dejó su trabajo en esta parroquia con nostalgia de los grandes y buenos momentos vividos en esta comunidad parroquial.



Vocaciones

Desde la llegada del primer agustino maltés al Brasil la idea fue de encarnarse en la iglesia local con todo lo que ello exige y merece, y buscar seguidores locales (Ad Gentes 1516). El trabajo vocacional es un trabajo que siempre fue tomada en serio.

Sucede que en el interior donde comenzamos nuestro trabajo no había condiciones para esta formación y por eso tuvimos el apoyo de los agustinos del Santísimo Nombre de Jesús que ya tenía un seminario menor y noviciado en Bragança PaulistaSP. Desde 1967 diversos jóvenes de nuestra parroquia fueron encaminados hacia allá. Algunos llegaron hasta hacer la profesión de votos evangélicos y dos fueron ordenados sacerdotes.

Esta interayuda de las Provincias duró hasta diciembre de 1984, porque como fue el plan de nuestra Provincia en la toma de posesión del terreno en la parroquia de Santa Rita de Cassia en São Paulo, al lado de la Iglesia Matriz fue construido el primer piso del Seminario. Con un padre responsable de esta pastoral vocacional diversos jóvenes tenían la oportunidad de pasar por una experiencia de vida religiosa agustiniana en este local.

Durante estos treinta años todo el trabajo que entraña esta historia fue llevado a cabo por los siguientes padres agustinos:

P. Paulo María Spiteri

P. George Debono

P. Ricardo Attard

P. Bernardo Coppini (+ 02.06.92)

P. Francisco Xavier Mifsud

P. Alfredo Tagliaferro

P. Gabriel Farrugia (+ 18.03.73)

P. Agostinho Debono

P. Adeodato C. Schembri (Actual Provincial en Malta)

P. George (Consolato) Bezzina

P. Paulo Aquilina

P. John Pace

P. Constantino Borg

P. Mario Abela (28)

P. Salvador Magro

P. Rafael Abdilla (*)

P. Luiz Augusto de Matos (29)

P. Jorge Luiz Mazini (30)



Padres Provinciales durante esta misión

P. Mariano Sammut

P. Ugolino Gatt (+ 070687)

P. Egidio Galea

P. Alberto Borg

P. Domingos Portelli

P. Adeodato C. Schembri



Afiliados a la Orden

Vicente Porcella Flores y esposa (Parque Novo MundoSP)

Jose Borges y esposa (ParanaibaMS)

Roberto Gracioli y esposa (ParanaibaMS)

João Batista Machado y esposa (ParanaibaMS)

Ruy Vallim de Mello y esposa (ParanaibaMS)

Afonso Vendrame y esposa (CassilandiaMS)

Jose Onofre Alves y esposa (Parque Novo Mundo SP)

Domingos Coleiro (Parque Novo MundoSP)

Jose Alcovia y esposa (Parque Novo MundoSP)

Manoel Araujo y esposa (Parque Novo MundoSP)

Adolorata Tangangello (Parque Novo MundoSP)

La formación de los Agustinos en Brasil

La preocupación por la formación de los agustinos brasileros aparece oficialmente por primera vez en 1927, después de la elección de la Provincia Nueva. Desde entonces no se ahorraron esfuerzos en esta dirección en medio de una historia accidentada y llena de percances. (31)

Tanto el Vicariato de Madrid como el Vicariato de Castilla recibieron jóvenes estudiantes que terminaron su formación en Brasil al inicio de la década de 1930.

Cada circunscripción se empeñó por cuenta propia en iniciar la obra vocacional y formativa. Así sucedió con la Viceprovincia a través de la "Escuela Apostólica San Agustín" Engenheiro Schmidt, iniciada en 1934, transformada en seminario apenas en 1960 según ya hemos explicado. En 1946 el Vicariato de Castilla adquiría en Bragança Paulista la hacienda "Bom Retiro", con la finalidad de dotar al Colegio Diocesano São Luis de una área deportiva entreviendo ya la posibilidad de instalar allí un seminario.

En 1950, el Asistente General, Fray Carlos Vicuña en su visita canónica al Brasil, entre otras determinaciones dejó la necesidad de erigir un seminario conjunto entre las tres provincias radicadas en Brasil, que sirviese de escuela Apostólica y Noviciado, indicando como mejor lugar la propiedad de Bragança Paulista. El proyecto no llegó a concretarse a pesar de los esfuerzos hechos por tres comisarios de aquella época. La Vicaria de Castilla siguió adelante con la obra iniciada instalando el Seminario de San Agustín. (32)

La Vicaría Matritense realizó una experiencia de formación efímera en Belo Horizonte, sin mayores resultados a la que llamó "Seminario Santa Rita" en el Colegio San Agustín (1965).

En 1968, se hacía realidad el primer noviciado intervicarial enviándose posteriormente los profesos a España para cursar Filosofía y Teología. 1970 era el segundo año del noviciado intervicarial. Después de esta experiencia siendo Delegado el Prior General Fray Pedro María Escurrena, se trató de llevar a la práctica el proyecto de fusión uniendo todos los seminaristas de los cursos de bachillerato en Bragança Paulista formándose una comunidad intervicarial.

De las reuniones y acuerdos entre los Superiores Mayores de los cuatro grupos agustinianos de Brasil, nació la FABRA (Federación de los Agustinos del Brasil), cuyos objetivos eran el trabajo vocacional formativo en conjunto y la cooperación en el área de pastoral y otros proyectos comunes. El Seminario Mayor de Filosofía se estableció en Belo Horizonte, al principio en el Colegio Santo Agostinho (197172). Más tarde en un apartamento próximo a la Universidad Católica (1973), para después ser trasladado a Barreiro, en la Fraternidad Agustiniana, donde se asumió también la Parroquia "Cristo Redentor" (1973).

Posteriormente se realizó el tercer noviciado en Belo Horizonte, en 1977 trasladándose los profesos a Rio de Janeiro, al año siguiente para iniciar la teología. Aún hubo algunos brasileros que hicieron su noviciado en España (La Vid y El Escorial) y otros en Boyacá (Colombia). El Cuarto Noviciado Intervicarial comenzó en 1982, en Bragança Paulista continuando el grupo los estudios en São Paulo en la Parroquia de Jesús Resucitado.

Poco a poco el proyecto inicial fue degenerando a consecuencia de las diferentes mentalidades entre las varias circunscripciones impidiendo una mayor cohesión para llevar adelante conjuntamente la formación.

El problema fue puesto sobre el tapete en el Capítulo General Intermedio de México en 1980, cuando la formación fue encargada a la Viceprovincia sin que se diese una solución satisfactoria a todos los grupos, continuando las tensiones con el descontento general de los brasileros. Las Vicarias Matritense y de Castilla continuaban contribuyendo con formadores y con dinero.

En 1983 la visita del Prior General, Fray Teodoro Tack se decidió preparar un anteproyecto para la fundación definitiva de la tan deseada Provincia de Brasil que sería formada con voluntarios de todos los grupos. Se realizaron varias reuniones y asambleas. A medida que se iban elaborando los estatutos disminuía el número de voluntarios permaneciendo la mayor parte de la Vicaría Matritense generando entonces un impase en este grupo. ¿Cuál sería en esa circunstancia su futuro?

En julio del mismo año el Provincial de Madrid fray José Rodríguez Diez, se reunía con el Vicariato en la asamblea extraordinaria para debatir esta cuestión. Surgió entonces la propuesta de que el Vicariato Matritense asumiese la formación como soporte jurídico afiliando a los brasileros y adscribiendo voluntarios para la continuación del proyecto formativo. Tal propuesta fue llevado adelante en Brasil entre los religiosos que se venían ocupando del anteproyecto y los respectivos Superiores Mayores y posteriormente fue estudiada y aprobada por el Capítulo General de 1983.

En aquella ocasión la Vicaría Matritense se encargaba de la formación asumiendo todas las casas debiendo contar con el apoyo de las demás circunscripciones. (33)

Actualmente la Viceprovincia se ha lanzado nuevamente al trabajo vocacional habiendo establecido ya las bases a las diversas etapas de la formación (34). La misión de Malta realizó una experiencia vocacional en el período 19851990. El Vicariato de Castilla retomó también el trabajo formativo con el Seminario Madre del Buen Consejo en Goiâna enviando sus primeros novicios para el noviciado de Puerto Rico.



La Federación Agustiniana Brasilera (FABRA)

Hemos hablado poco sobre la FABRA que articulaba a los grupos agustinianos de Brasil en un proyecto intervicarial de formación y mutua colaboración. Jurídicamente dejó de existir en 1983. La sigla de FABRA significaba Federación de los Agustinos de Brasil (OSA). Hablaremos ahora de otra entidad que congrega circunscripciones de otras familias de inspiración agustiniana.

La idea de reunir a los miembros de varias circunscripciones que integran La Gran Familia Agustiniana de Brasil se concretizó por primera vez en 1975 del 14 al 17 de enero llamado Primer Encuentro Nacional Agustiniano en ItaiciSP en aquel año se celebraba los 75 años de la llegada de los recoletos y de los agustinos al Brasil (18991975). El tema central del encuentro fue la "Reflexión vivencial sobre la vida y doctrina de San Agustín". Estuvieron presentes el entonces Prior General de la Orden fray Teodoro Tack y el Cardenal de São Paulo, don Paulo Evaristo Arns. (35)

Esta feliz iniciativa produjo un deseo incontenible de nuevos encuentros. Así, del 2 al 6 de febrero de 1981, también en Itaici se realizó el Segundo Encuentro cuyo tema fue la "Oración, contemplación, y vida comunitaria en San Agustín". En enero de 1984, en el Centro Santa FeSP se celebró el Tercer Encuentro o Congreso ("Eclesiología en el pensamiento del Hiponense") dirigido por fray Cesáreo Antonio de Figueiredo, OFM que al final del encuentro recibía la noticia de su nombramiento como Obispo Auxiliar de Teófilo OtoniMG.

Ya el Cuarto Congreso (0509 de enero de 1987) realizado en el Colegio Agustiniano MendelSP se celebró en el marco del XVI Centenario de la Conversión de San Agustín, abordando el significado de la conversión de la vida y obra del Doctor de la Gracia y la realidad latinoamericana. En la eucaristía de clausura, Dn. Luciano Mendes de Almeida, SJ (por entonces Obispo Auxiliar de São Paulo; actualmente Arzobispo de MarianaMG y Presidente de la CNBB), exhortaba a los agustinos y agustinas a buscar su identidad, en el servicio a la Iglesia y al pueblo brasilero, rescatando y divulgando a San Agustín sus obras y su espiritualidad, para que se vuelva presencia en la vida social y eclesial a través de la vida comunitaria agustiniana.

Aquel encuentro significó un paso adelante en relación con los anteriores con la propuesta de creación de la Federación Agustiniana Brasilera (FABRA), que se hizo realidad en la reunión fundacional del 25 de febrero de 1988 en la Residencia Viceprovincial con la presencia de los Superiores y Superioras Mayores de varias circunscripciones agustinianas brasileras.

La Federación nació con el propósito de dinamizar los encuentros y promover el intercambio de experiencias y colaboración mutua en varios sectores entre todos los que la componen (15 actualmente) además de articular otras actividades comunes. En aquella ocasión la presidencia fue constituida de esta manera: Presidente, Fray Francisco A. Morales Cano, OSA; Vicepresidente, Fray José Luis Martínez, OSA; y TesoreroSecretario Fray Eneas Berilli, OAR. En el siguiente mandato fue elegida como Presidente la Hna. Rita Cola, MAR. Actualmente la presidencia está conformada por el P. José Luis Martínez, OSA, como Presidente; Fray Juan Bosco Dubot, AA, como Vicepresidente y Fray Eneas Berilli, OAR, como TesoreroSecretario.

En enero de 1990 se realizaba el Quinto Congreso en el Colegio Agustiniano MendelSP con el tema "San Agustín Pastor de Almas". Entre otros estuvieron presentes el Prior General de los Agustinos Descalzos, Fray Eugenio Cavallari; don Florentino Zabalza, OAR, Obispo de Lábrea; Fray Jesús Guzmán, OSA; Asistente General para América Latina. En enero de 1993 se realizó el Sexto Congreso Nacional Agustiniano cuyo tema fue "La Espiritualidad Agustiniana en América Latina".

Durante esos años se formaron varias comisiones: Formadores (con reuniones semestrales), Formandos (con dos Encuentros Nacionales a partir del Noviciado), Historiadores (con el proyecto futuro de una "Revista Agustiniana Brasilera"), Educación y Colegios (la más dinámica con diversos encuentros: directores, supervisores, orientadores, pastoral, jóvenes) y Devocionario. Forman parte de la Comisión Directiva los Superiores y Superioras Mayores.

Actualmente la FABRA se compone de las siguientes circunscripciones agustinianas: de la Orden de San Agustín: Viceprovincia del Brasil, Vicariato de la Consolación, Vicariato de Castilla y Región de Malta; de la Orden de los Agustinos Recoletos: Provincia de Santa Rita y Vicariato de Santo Tomás de Villanueva; Provincia de Cristo Rey de las Agustinas Misioneras; Viceprovincia de Santa Rita de las Misioneras Agustinas Recoletas; Delegación de Brasil de la Orden de los Agustinos Descalzos; de la Congregación de los Agustinos de la Asunción: La Viceprovincia de São Paulo y la Región de Rio de Janeiro; Delegación de Brasil de la Congregación de las Hnas. Agustinas Siervas de Jesús y María; Priorato "Lumen Christi" de la Orden de las Canónigas Regulares del Santo Sepulcro; Viceprovincia del Brasil de la Congregación de las Oblatas de la Asunción y de la Orden de los Canónigos Regulares Premonstratenses: Priorato de Jaú y región de Montes Claros.



Conclusión

Sin contar el primer período de la presencia agustiniana en Brasil (16931824), este segundo período (1899...) extiende nuestra presencia y colaboración con la iglesia y sociedad brasilera durante casi un siglo. Estamos a las vísperas de la celebración de los 100 años de nuestra historia en Brasil.

Hay una gran riqueza por descubrir en estos casi cien años; esta pequeña reseña no intenta ni de lejos dar cuenta del significado de nuestra historia común en sus luces y sombras por utilizar una expresión de Juan Pablo II. En ella no hemos podido citar siquiera tantos nombres que merecerían una mención especial; queda pendiente para otra ocasión. Sirvan estas páginas para animar a aquellos que tienen la inquietud de un conocimiento más pleno y exhaustivo de la verdad histórica iluminada por la realidad evangélica, "siempre antigua y siempre nueva".

Es necesario recordar que los AgustinosOSA tuvieron en total en este período cerca de 80 fundaciones que gradualmente por diversas circunstancias fueron cerradas. Actualmente hay cerca de 40 fundaciones entre casas y obras. Cada una de ellas representa al mismo tiempo los desafíos y las respuestas del pasado y del presente.

Entre tanto surgen a cada momento nuevos desafíos: ¿Cómo continuar fieles al Evangelio, al llamado de la Iglesia, al carisma agustiniano? Es ésta una respuesta que no puede ser respondida individualmente, sino en comunidad de hermanos y amigos si nos abrimos al presente con coraje y nos arriesgamos a la aventura del futuro, que está en las manos de Dios y en nuestras frágiles manos...



1. HERNANDEZ DE TORRE, Eduardo. Episcopado agustiniano en América Latina, Ediciones Agustinianas, Santiago, 1981. p. 67s. 77s.

2. GAVIGAN, John. The Augustinians from the French Revolution to Modern Times, Agustinian Press, Villanova, 1989. p. 53s.

3. PEIXOTO, Afrânio. "Breviário da Bahia", cf. citação de Luiz Tolosa Filho, In: Jubileu Áureo da ViceProvíncia do S.N. de J. no Brasil; TERRA, Martin J.E. Frei Boff e o neogalicanismo da Igreja Brasileira. p. 7.

4. AZZI, Riolando. A Cristandade Colonial, um projeto autoritário, Paulinas, São Paulo, 1987. 233 p.; VV.AA. História da Igreja no Brasil, Vozes, Paulinas, CEHILA, 2 tomos (II/1, 1983; II/2, 1985).

5. AZZI, Riolando. op. cit. passim.

6. HOORNAERT, Eduardo. A formação do catolicismo brasileiro (15501800), 3 ed. Vozes, Petrópolis, 1991. 140 p.

7. HOORNAERT, E. O cristianismo moreno do Brasil, Vozes, Petrópolis, 1991. 181 p.

8. AZZI, Riolando. "Dom Antônio Viçoso e os Bispos Reformadores". In: Revista Eclesiástica Brasileira (1974) 646662; A romanização da Igreja a partir da República (1989), In: AA.VV. Inculturação e Libertação, Paulinas, São Paulo, 1986. p. 105110.

9. LUSTOSA, Oscar F. A Igreja Católica no Brasil República, Paulinas, São Paulo, 1991. 178 p.

10. DUSSEL, Enrique. Historia de la Iglesia en América Latina, Facultad de Filosofía, Universidad San Tomás de Aquino, Bogotá, 1978. 419 p. RICHARD, Pablo. Morte das cristandades e nascimento da Igreja, análise histórica e interpretação teológica na América Latina, 2. ed., Paulinas, São Paulo, 1984. 252 p.

11. VV.AA. A vida religiosa no Brasil, enfoques históricos, Paulinas, São Paulo, 1983. 213 p.; VV.AA. Os religiosos no Brasil, enfoques históricos, Paulinas, São Paulo, 1986. 218 p.

12. A Comissão de História da FABRA está por publicar uma pequena "Resenha Histórica da Grande Família Agostiniana no Brasil", onde se contemplará, resumidamente, a história dos vários grupos de inspiração agostiniana que a compõem.

13. Cf. Fr. Antonio. Agustinos Recoletos en Brasil. 14 p., mecanografiado; BELMONTE, Augustinho. A Ordem de Agostinianos Recoletos no Brasil. 18 p., mecanografiado.

14. AZZI, Riolando. A Igreja e os migrantes: os primórdios da obra es calabriniana no Brasil (18841904), Paulinas, São Paulo, 1987. p. 7882.

15. Basicamente seguimos os estudos monográficos dos vários autores da Breve História dos Padres Agostiniános e Freiras Missionárias Agostinianas do Brasil, Ave Maria, São Paulo, s. d.; outras informações sobre a ViceProvíncia podem encontrarse em: Analecta Augustiniana, Vol. III; IV. p. 1521; XIII; XIV, p. 329; MARTINEZ, Bernardo. Apuntes históricos de la Provincia Agustiniana del S.N. de Jesus América (compilados quando era secretário provincial, em 1909). p. 180230; Estado de la Provincia Agustiniana del S.N. de Jesus de Filipinas, con un breve resumen de su historia y de sus nuevas fundaciones; Imprenta Asilo de Huérfanos, 1905, p. 2523, 32433; RODRIGUEZ, Isacio. Estado actual de las Misiones Agustinoespañolas. In: Augustiniana (1956) p. 78390. UU.AA. Jubileo Aureo da Vice Província Agostiniana do S.N.J. no Brasil (18991949), Ave Maria, São Paulo, 1949. 96 p.; GUTIERREZ, Laurentino. Agustinos en el Brasil: 75 años de apostolado. In: Religión y Cultura (1975) p. 379 402; VV.AA. Colégio Santo Agostinho, Jubileu de Ouro, Loyola, 1981.

16. ARCÂNGELO, Miguel. Missionários Redentoristas Alemães em Goiás, uma participação nos movimentos da Reforma e Renovação Católicas (18941944). Aí se encontram sobejos dados sob a atuação de D.E. Duarte da Silva, bispo de Goiás.

17. MARTINEZ, Bernardo. op. cit. p. 180230.

18. MARTINEZ, Hipólito. Breve História. p. 22.

19. Id., ib. p. 23.

20. MARTINEZ, Bernardo, op. cit. p. 287. 294298.

21. ASENSIO, Teódulo. Notas biográficas sobre el Excmo. y Revmo. P. Germán Vega Campón, OSA, La Vid, 1989. 21 p.

22. GUTIERREZ, Eladio. Resenha Histórica: Vicariato da Província de Castela no Brasil, 1992. p. 912.

23. VIÑAS ROMAN, Teófilo. "Breve História". p. 5576; Id. Apuntes para una historia de los Agustinos del Escorial en el Brasil. In: La Ciudad de Dios vol. CXC nº 1 (1977) p. 115142.

24. Id. ib. p. 60.

25. Vide vários álbuns comemorativos do "Colégio Santo Agostinho" de Belo Horizonte: 1954, 1959, 1964, 1966, 1967, 1968, 1969, 1973, 1974, 1975 e 1977.

26. VICUÑA, Carlos. Mártires Agustinos de El Escorial, Imprenta del Monasterio de El Escorial, 1945. 310 p.

27. FERNANDEZ, Victoriano. Breve História. p. 77109; GARCIA, Juan. Reseña histórica del Vicariato Provincial de la Viceprovincia Agustiniana de Castilla en el Brasil (inédita e incababada); Amor Pondus. Publicación del Teologádo de la Provincia de Castilla, Calahorra (Logroño) 31/1958; GUTIERREZ, Eladio, op. cit. 222 p.

28. Hicieron la formación teológica en Brasil

29. Pertenecen hoy a la Viceprovincia del Santísimo Nombre de Jesús de Brasil.

30. Hoy trabaja en la región episcopal de SantanaSP.

31. MARTINEZ, Hipólito. Breve História. p. 44.

32. GUTIERREZ, Eladio. op. cit. p. 5868.

33. Vide o processo de formação no Vicariato da Consolação, conforme escrevemos acima. Todos os passos desse processo, desde as Atas do Prior Geral até a aprovação pelo Capítulo Geral de 1983 se encontram registrados na documentação havida no Arquivo Vicarial, em Belo Horizonte; vide também: PINHEIRO, Luiz Antônio. O Processo do "Novo Grupo", relatório para a 15a. Assembléia Vicarial.

34. Vide acima o ítem referente a ViceProvincia.

35. Foram Publicadas as atas e algumas ponências dos vários encontros, menos as do IVº Congreso Nacional Agostiniano (1987).