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ENCUENTROS DE FORMADORES OALA
1977-1994

Introducción

Febrero de 1977- Lima

Abril de1980- Cochabamba

Enero de1981- Buenos Aires

Diciembre de1986- Caracas

Enero de 1988- Conocoto

Julio de 1991-
San José

Julio de 1993- Bogotá

Septiembre de 1994- Lima

CONCLUSIÓN-
El Hilo Conductor de los Encuentros de Formadores

 

Reunión de Formadores de América Latina

Documentos de los Encuentros de Formadores en América Latina


DOCUMENTO DE LIMA-77
-Encuentro de Formadores, 7-12 de Febrero de 1977-

SUGERENCIAS

La reunión del primer Encuentro Vocacional comenzó el día 7 de febrero y el encargado de la bienvenida e inauguración fue el Superior del Colegio San Agustín de Lima (lugar del encuentro), quien enfocó sobre todo la importancia del problema en nuestro tiempo de crisis y de esperanzas por un cierto renacer de las vocaciones en diversas naciones.

Asistieron 23 personas que representaban a 6 países, en el siguiente orden:

PERÚ
-Agustín Alcalá, misionero en Iquitos.
-Eugenio Alonso, Promotor de Vocaciones y asesor de dicha área, a nivel de OALA.
-David Araujo, párroco de Guadalulpe.
-Héctor Boggio, Delegado vocacional en Chiclayo.
-Manuel Cano, profesor del Colegio Santa Rosa de Chosica.
-Mauel Cid, maestro de novicios en Lima
-Juan Dawling, superior regional de Chulucanas, Morropón.
-María Angélica Jiménez, integrante del equipo de formación, Morropón.
-Ceferino Flores, integrante del equipo de formación, Lima.
-Senén González, presidente de la Comisión de formadores.
-Mercedes Lara, del equipo de fomacion, Lima
-Alfonso Martínez, Vicario cooperador de San Pedo de Lloc.
-Domingo Raponi, Promotor Vocacional de Chuquibambilla.
-Angel Ruíz, maestro de aspirantes en Chosica.
-Soledad Ruíz, presidenta de la comisión de formación.
-Félix Valbuena, párroco de Pueblo Nuevo.

MEXICO:
-José Guadalupe Ayala, director del colegio vocacional.
-Carlos Murillo, Promotor Vocacional de Michoacán, Guadalajara.

CHILE:
- Fernando Valenzuela, vicemaestro de Novicios en Santiago.
- Osvaldo Walker, profesor en Santiago.

ECUADOR.
-Luis Moya, promotor Vocacional, en Quito.

ARGENTINA:
-Remigio Paramio, viceprovincial, Buenos Aires.

COLOMBIA:
-Julián Prieto, maestro de novicios, en Bojacá..

El trabajo se organizó en conformidad con el programa elaborado y que se dio a conocer oportunamente en el anterior boletín; los grupos de trabajo fueron dos, bajo la coordinación general de Eugenio Alonso, asesor de OALA en el área de vocaciones.

El plan de trabajo de esta semana vocacional se llevó a cabo, si~ dentro del plan de hermandad
y vivencia agustiniana, partiendo de la oración, el trabajo y la recreación comunitaria que mamaron un ambiente tan vivencial que a muchos hizo recordar el pasaje de San Pedro en el Tabor, cuando decían que "fue una experiencia nueva de lo que es ser Agustino, y no lo que se está acostumbrado a vivir en la propia nación".

El método de trabajo intentado era "partir de las experiencias para que con la iluminación crítica de los conferenciantes y el diálogo en grupos, se intenta buscar diversos proyectos vocacionales, según las circunstancias de realidades nacionales y eclesiales. No pudimos completarlo y se detectaba la preocupación por aclarar, resolver y dar solución definitiva a la amplia problemática vocacional" (Introducción, Encuentro Vocacional OALA, Lima, Febrero, 1977).*

Los primeros días en la mañana, se tuvieron charlas de tres conferenciantes: P. Hugo Cubert,O.P.:
"Arcas preferenciales en la pastoral vocacional". P. José Luis: "Antropología, Celibato y Comunidad". P. Reinaldo Rodríguez: 'E1 Carisma Religioso en Latinoamérica". Por la tarde, en grupos, se analizó y discutió tanto lo escuchado de los conferenciantes, como el estudio de un proyecto sobre cómo trabajar en las vocaciones,

Al final de cada jornada había una reunión general en la que se compartía el trabajo de los dos grupos de trabajo, tratando de resumir diariamente el avance obtenido.

El tiempo resultó corto para una problemática tan grande. "Pero en el fondo de estos días latía algo muy importante: se revelaba la necesidad de vivir el carisma agustiniano. Mejor que carisma, mística agustiniana que tiene sentido más dinámico. Si nosotros no somos signo es inútil hablar de vocaciones. Y si estamos convencidos de nuestra vocación hay que explicitarlo, hay que hacer notar ese signo. Toda comunidad que no tiene mística muere. Hoy nos toca hacer realidad en nuestra fraternidad la mística agustiniana para poder reflexionar sobre esta vivencia y después, desde la praxis comprometida en esta realidad y en esta Iglesia Latinoamericana, releer el carisma agustiniano y dinamizar así nuestras comunidades, haciendo eficaz el amor de Dios entre los hombres por medio de nuestra comunidad.

Además, otra preocupación que sobresalía era ver los posibles caminos a seguir en el problema vocacional. La vocación religiosa supone una opción cristiana previa. Se necesita intensificar la pastoral de conjunto en las diversas áreas: familiar, parroquial, de educadores y, de forma especial, la pastoral juvenil, de tal forma que se vocacionalice toda la pastoral. De aquí vendrán las vocaciones y lo importante se presenta en ver los caminos para acompañar en el proceso vocacional. El futuro se veía esperanzador y se sentía la necesidad de comunicar y universalizar la esperanza".

Entre los participantes había un pluralismo evidente dentro de realidades y mentalidades diversas. Por otra parte, el tiempo era corto, razón por la que los participantes no creyeron oportuno lanzar conclusiones definitivas, sino recoger inquietudes y preocupaciones de los asistentes para comunicarles a los demás hermanos que no estaban presentes. De todo ello se destaca la preocupación seria por vivir el carisma agustiniano, la organización de una pastoral vocacional adecuada, el trabajo común y organizado de todos los agustinos de la rama masculina y femenina en cada país. Era el deseo de todos que las experiencias habidas y por haber en este campo sean dadas a conocer oportunamente por medio del Boletín de OALA. El tema del noviciado común es una idea que debe madurar.

El Encuentro terminó el 12 de febrero y se presentaron a consideración de los hermanos agustinos
de Latinoamérica las siguientes sugerencias:

1. Tenemos fe que los agustinos de América estamos superando la crisis vocacional, lo cual universali7a nuestra esperanza.

2. Trabajar con todos los medios que tenemos a nuestro alcance, aunque la cosecha no sea inmediata.

3. Intentamos que nuestros aportes clarifiquen la confusión de los hermanos respecto a los nuevos métodos vocacionales.

4. Hemos descubierto que, a pesar del gran esfuerzo desplegado, no se puede agotar toda la problemática vocacional en un solo encuentro. Lo cual nos insta a buscar los medios adecuados para continuar profundizándola.

5. En consecuencia, recomendamos que se celebren encuentros vocacionales entre nuestros hermanos y hermanas religiosos a nivel local y a niveles más amplios.

6. Pedimos que todas las experiencias vocacionales las intercambiemos a través del Boletín de OALA, que llegará necesariamente a todas las casas.

7. Constatamos la necesidad de que nuestras comunidades se sientan responsables del agudo problema vocacional, colaborando más con los promotores.

8. Las comunidades, en reunión mensual, o en el capítulo local, sean informadas por los Promotores, para que tengan oportunidad de comprometerse en el trabajo vocacional.

9. En el ámbito de todas las actividades agustinianas, dése prioridad al trabajo vocacional en todos los aspectos, no reparando inclusive en lo económico.

10. Debemos aprovechar la pastoral familiar y las comunidades de base como una de las preferenciales para el trabajo vocacional -

11. Se pide que nuestras Hermanas agustinas siempre que necesiten un sacerdote para orientar su trabajo vocacional, sean auxiliadas por los sacerdotes y religiosos agustinos con generosidad.

12. Los Agustinos estamos conscientes de que somos Iglesia. Por lo tanto, debemos estar inmersos en la pastoral de conjunto.

13. Los grupos de movimientos juveniles siguen siendo, en América, el área preferencial - de desarrollo vocacional: laical, sacerdotal y religioso.

14. La actualización del carisma agustiniano en América Latina, reclama una nueva forma de Vida Religiosa como compromiso de servicio a los pobres y oprimidos.

15. Sería conveniente que a las próximas reuniones vocacionales de OALA fueran invitados nuestros hermanos Recoletos.

16. Se pide que para el próximo Encuentro, se traigan estudiados los lineamientos para un noviciado común, rogando el apoyo entusiasta de los Superiores.

17.- Hemos descubierto que lo encontrado en esta convivencia será enriquecedor para todos, si seguimos profundizando, y lo concretizamos en cada uno de nuestros países.

18. Que el Promotor y la Comunidad religiosa estén integrados en la pastoral de conjunto, para que su acción eclesial sea más eficaz.

Nota.-Este supuesto documento tiene, evidentemente, el estilo de una crónica. De hecho, en la página 10, 2° párrafo, parece darnos una cita de la "Introducción, Encuentro Vocacional OALA, Lima, febrero,1977". ¿Existe un documento Lima-77, diferente de esta "crónica"1.Por el momento lo desconocemos. F.G.

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