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Boletín 2007 no. 1

Palabras de Introducción

Discurso del Secretario-General Luiz Augusto de Mattos

Acta de la Asamblea

Homilia de Clausura

Teologado Latinoamericano

Noticias de Brasil

Curso para Preparación de Votos Solemnes

Noticias Breves


 

Nuestro caminar agustiniano en el profesorio Latinoamericano Fr. Antonio de la Calancha


            Desde nuestro profesorio  latinoamericano Fr. Antonio de la Calancha (Cochabamba- Bolivia), vivimos momentos de mucha gratitud a Dios por habernos hecho partícipes de esta gran aventura latinoamericana en tierras bolivianas.

            Estar vivenciando el carisma agustiniano en Bolivia, es aprender diferentes vivencias del proyecto que tiene la Orden para la integración latinoamericana; así lo sentimos y así respondemos a esta gratitud para con Dios, para con los superiores y para nuestros frailes del profesorio.

            Hemos venido al profesorio con muchos anhelos, sueños, desafíos de querer hacer realidad el ideal agustiniano el de ser “una sola alma y un solo corazón orientados hacia Dios”[1] con nuestros hermanos latinoamericanos.

            A lo largo de estos años nuestra visión agustiniana se ha ido ensanchando porque sentimos que nuestra “vida espiritual se consagra también al provecho de toda la Iglesia. De ahí nace el deber de trabajar según las fuerzas y según la forma de la propia vocación”[2], con el fin de “presentar siempre mejor a Cristo a sus fieles y al mundo”[3].

            El proyecto de nuestro profesorio nace con una concepción de Orden sin provincialismo, “con una apertura hacia lo diferente, fortaleciendo la integración, diversidad, intercambio de experiencia y el dinamismo intercultural que fortalece la vida comunitaria agustiniana (…) teniendo siempre el gran objetivo: formar un solo cuerpo, una gran familia, que respetando las particularidades de cada persona, de cada grupo, se vive la unidad”[4]; por eso nuestro pasos se han venido solidificando a través del compromiso de nosotros los estudiantes que hemos decidido ofrecernos a Dios a través  de los votos solemnes, las órdenes al diaconado y del ministerio de los presbíteros.

            Sabemos que el ministerio de los presbíteros conlleva el ofrecerse “como sacrificio viviente, santo y acepto a Dios (Rom 12,2)”[5] y  el de  procurar la gloria de Dios Padre en Cristo[6]. Por eso, la ordenación presbiteral de Fr. Wilson Posligua (Prov. San Miguel de Quito) y de mi persona (Fr. Juan Carlos Olaya- Vicariato San Juan de Sahagún de Chulucanas) la vivimos como un donarse a los desafíos que tiene nuestra Orden para América Latina y de esta manera dar mayor gloria a Dios en Cristo Jesús.

            Gracias frailes superiores mayores por permitirnos experimentar nuevas visiones agustinianas en tierras bolivianas.

Fr. Juan Carlos Olaya OSA


 

[1] Por eso dice nuestro padre Agustín: “sólo vivirán verdaderamente juntos cuando tengan un solo corazón”. Comentarios a los Salmos 99/ 100, 11.

[2] CONSTITUCIÓN DOGMÁTICA  “Lumen Gentium”, n. 44

[3] Ibid, n 46

[4] Documento anexo a la carta del 31 de marzo del 2001: Documento del Proyecto Hipona, Corazón Nuevo, p. 2.

[5] DECRETO  “Presbyterorum ordinis”, n. 2

[6] Ibidem.